viernes, 4 de noviembre de 2022

DR. ADOLPHO LUTZ

El Dr. Lutz nació en Rio de Janeiro, Brasil, el 18 de diciembre de 1855.
Su padre, Gustavo Lutz, suizo de nacimiento, se casó en 1849 con Mathilde Oberteuffer de la misma nacionalidad. Con ella se embarcó rumbo a Rio, Brasil, donde se establecieron.
Su abuelo paterno, el Dr. Frederico Bernardo Jacob Lutz, formado cum laude en medicina y cirugía por la Universidad de Geidelberg, en 1807, tomo parte como cirujano de las campañas napoleónicas, fundando más tarde, el Cuerpo Médico del Ejército Suizo.
Elegido miembro del Consejo de Berna, actuó enérgicamente en el conflicto entre Cantao y el Gobierno de la Confederación Helvética.
Los Lutz figuran desde 1559 como familias tradicionales de Berna con derecho a votar y portar armas.
En 1891, Lutz estaba ejerciendo como Profesor en Honolulu cuando conoció a Amy Chesshyre Fowler, de nacionalidad inglesa, que trabajaba como enfermera voluntaria de leprosos, siguiendo el ejemplo de Florence Nightingale. Se casaron y tuvieron dos hijos, ambos nacidos en San Pablo, Bertha naturalista del Museo Nacional y Gualter Adolpho, profesor catedrático de la Facultad Nacional de Medicina de la Universidad de Brasil.
Adolpho Lutz fallece en Rio de Janeiro, el 6 de octubre de 1940, pocas semanas antes de cumplir los 85 años.
De 1857 a 1864, sus padres estaban en Berna, dejando a sus hijos mayores en Basilea a su regreso a Brasil, para que concurran a la escuela.
Mudándose a Berna en 1871, Lutz termina su secundario y en 1874 se inscribe en el curso de medicina de la Universidad frecuentando también las cátedras de Ciencias Naturales.
En 1879 obtiene su diploma de médico y su Doctorado en julio de 1880. 
Mientras estudiaba, hacía cursos y realizaba prácticas en otras universidades recibiendo certificados y diplomas. 
Así, se matriculó en Leipzig en 1877-78 en busca de una educación biológica más evolucionada porque desde la infancia tenía el deseo de dedicarse a la biología. Estuvo en Estrasburgo en 1878, como aprendiz de Ginecología y Obstetricia en Praga, centro precursor de modernos conocimientos sobre infecciones.
Despues de su formación emprende extensos viajes de estudios, pasando la última parte de 1880 en Viena y la primera parte de 1881 en Londres donde conoce a Lord Lister. En julio estuvo en Paris. Ese mismo año regresa a su tierra natal revalidando sus diplomas para "poder ejercer mi profesión en el Imperio de Brasil".
La vida profesional y científica de Adolpho Lutz puede ser dividida en tres partes principales.
La primera, de 1879 a 1892 ejerciendo la clínica como profesión. 
De 1893 a 1908 le correspondió, como Director del Instituto Bacteriológico del Estado de San Pablo, la misión de vanguardia de la Salud Pública y Epidemiología modernas, obligando a transformar la medicina tradicional, de conceptos vagos, apoyados principalmente en la autoridad de la palabra, en ciencia exacta, que exige explicaciones precisas de los hechos.
La tercera y última fase, que va de 1908 hasta su muerte en 1940 puede, al fin, realizar el gran sueño de su vida en el Instituto Oswaldo Cruz, de Manguinhos: dedicarse exclusivamente a investigar sin preocupaciones por fuera de la ciencia. Gracias a su logevidad, esta fase iniciada tardíamente, después de los cincuenta años, fue mas larga que las otras dos fases reunidas.
En 1879, mientras esperaba la defensa de su tesis para el doctorado, fue escogido como asistente interno del Hospital Cantonal de Sankt-Gallen donde se familiarizó con los mas variados casos clínicos, publicando algunas observaciones de la casuística encontrada.
De regreso a Brasil revalida su diploma el primer semestre de 1882. En julio de este mismo año se muda a Limeira, provincia de San Pablo, donde ejerce la medicina hasta marzo de 1885 y, nuevamente, de marzo del 1886 hasta fin de año.
En ese interín, viaja a Europa a fin de realizar investigaciones sobre los microorganismos de la lepra en el célebre Servicio Dermatológico del Dr. Unna en Hamburgo.
Pasa por EEUU antes de regresar a Brasil. En enero de 1887 se muda a la capital de San Pablo.
En setiembre de 1889 acepta la invitación para dirigir los servicios de Lepra y hacer ensayos terapéuticos en Hawaii. Permanece en Honolulu hasta mediados de 1892. En el final del semestre ejerce como clínico en San Francisco de California y, a fin de año, regresa a Brasil.
En este período Lutz publica su monografía sobre "Ankylostoma e Ankylostomiase". Describe una nueva dolencia observada en niños de Limeira (1886) y un largo trabajo sobre la Lepra (1887).
En 1891 describe de Honolulu un cuadro clínico mas tarde denominado "Nodosidades juxta-articulares" y publica su trabajo fundamental "Amebas, enteritis y hepatitis". Inicia observaciones entomológicas que serviran como punto de partida para su trabajo como sanitarista en un período inmediato.
De 1893 a 1908, al frente del Instituto Bacteriológico del Estado de San Pablo, Lutz está a la vanguardia de la lucha contra las dolencias epidemiológicas y endémicas que asolan el Estado.
En marzo de aquel año fue nombrado Sub-Director del Instituto fundado poco antes. En octubre fue promovido a Director en remplazo de Félix Le Dantec que, de regreso a Francia, lo recomienda como sucesor, no solo como bacteriologista competente, sino tambien como versado en parasitología y medicina tropical. Fueron años de trabajos incesantes.
Mientras en 1893 llega el cólera asiático. 
Los últimos años un poco más pacíficos, Lutz encara una serie de trabajos sobre entomología médica, protozoología y micología, describiendo dos micosis, una de ellas muy grave.
Acepta la invitación de Oswaldo Cruz para trabajar en Magarinhos. Allí Lutz puede finalmente, realizar la principal aspiración de su existencia; dedicarse enteramente a la ciencia. Surgirán trabajos en entomología médica, helmintología y zoología aplicada a la Medicina Tropical de interes puramente biológico.
En busca de nuevos horizontes emprende viajes de estudios a diversas regiones del país y del continente. En 1912 navega el río San Francisco y sus afluentes observando la patología de su fauna y flora regional. 
Recorre el nordeste en 1917 estudiando el "Schistosomum mansoni". Al año siguiente desciende por el Paraná hasta Buenos Aires pasando por Asunción y las Cataratas del Iguazú.
En 1920 fue invitado por la Reina Elizabeth de Bélgica para acompañar, como naturalista, la comitiva real por el interior de San Pablo.
En 1925 inicia estudios de zoología y parasitologia en Venezuela. Retorna a Rio Grande do Norte en los primitivos aviones del Correo Aéreo Latecoére en 1928. En esa ocasión advierte sobre los peligros de estos viajes confirmado luego por la invasión del Anopheles gambiae.
A todo esto hay que agregar las colecciones que Lutz reunió: 20.000 especímenes de insectos, especialmente dípteros, moluscos, varios miles de láminas entomológicas y sobre todo, helmintológicas, unos 5210 ejemplares de anfíbios anuros, colecciones menores de reptiles, cráneos y pieles de mamíferos.
Lutz participa de numerosos congresos desde 1885 cuando presenta una dolencia nueva, la actual "Acrodinia infantil" en el Congreso Médico y Biológico de Estrasburgo. En 1905 representa al estado de San Pablo en el Congreso Internacional de Tuberculosis de Paris.
En 1915 participa con Oswaldo Cruz, de la Asamblea de Medicina Veterinaria en Londres.
Comparece en todas las Conferencias Americanas y brasileras de Lepra, discutiendo la profilaxis, sustentando con énfasis y autoridad sus puntos de vista sobre la transmisión y la epidemiología.
En el Bicentenario de la American Philosophical Society, fundada en 1728 por Benjamin Franklin, fue invitado de Honor para representar a los científicos de América del Sur.
Frecuentaba algunas asociaciones médicas y científicas como la Sociedad Científica de San Pablo. Tuvo parte activa en la Sociedad Brasilera de Dermatología interviniendo en los debates con observaciones basadas en su larga experiencia clínica.
Fue socio correspondiente de la Sociedad de Medicina y Cirugía de Rio (1889), la Sociedad de Patología Exótica de Francia (1908), la Sociedad de Dermatología y Sociedad de Salud Pública e Ingeniería Sanitaria de Argentina (1909), la Academia Nacional de Medicina de Lima (1922), la Sociedad de Ciencias Naturales de St. Gallén (1879), el Instituto Histórico y Geográfico de San Pablo (1900), el Museo Americano de Historia Natural (1923), del Kaiserliche Deutsche Akademie der Naturforcher (1925), del Instituto del Museo de la Universidad de La Plata, Buenos Aires (1936), entre otras.
En 1953 recibió el Premio Einstein de la Academia Brasilera de Ciencias. Pusieron su nombre en un puesto de Profilaxis Rural de Marabá, en el Hospital de Aquidauana y del Instituto Bacteriológico de San Pablo. En Rio Grande do Sul fue instituído un premio de Medicina denominado "Premio Adolpho Lutz".
Adolpho Lutz estudió minuciosamente en dos pacientes de São Paulo una enfermedad distinta, causante de graves lesiones, que destruían la mucosa de la encía, con dolorosas repercusiones en los ganglios. Al cabo de casi tres años de investigación, en abril de 1908, Lutz publicó dos artículos en Brazil-Medico Revista Semanal de Medicina e Cirurgia, en los cuales calificaba a la afección como micosis seudococcídica, después de identificar al hongo que la causaba y describir el modo característico de reproducción.
"Lutz hizo algo absolutamente notable y raro", afirma el farmacéutico y bioquímico Cezar Mendes de Assis, investigador del Instituto Adolpho Lutz, "describió la enfermedad, observó en el microscopio a su agente en material clínico, lo aisló en medio de cultivos, demostró su dimorfismo (dos formas distintas, moho a 27ºC y levaduras a 36ºC), describió sus características, reprodujo la enfermedad en diferentes animales de laboratorio y re-aisló al agente. Asimismo, se preocupó con decir que estaba delante de una nueva enfermedad y advirtió sobre la dificultad de diferenciarla de afecciones semejantes".
El nombre adoptado para la enfermedad desde 1971, después del congreso de especialistas en Colombia, es paracoccidioidomicosis, aunque haya tenido varios nombres desde 1908 uno de ellos fue enfermedad de Lutz. Se trata de una micosis causada por el hongo Paracoccidiodes brasiliensis, presente en el área rural, que penetra más frecuentemente en el organismo humano por vía de la inhalación. Cuando no es diagnosticada y tratada en el momento preciso, provoca heridas en la piel y lesiones en la boca, puede contaminar los pulmones, el bazo y el hígado, infiltrarse en los huesos, en las articulaciones y en el sistema nervioso central. Algunas de las actividades de riesgo son aquellas vinculadas a la agricultura, a la práctica de jardinería y al transporte de vegetales. La deforestación y la preparación del suelo para la siembra aumentan la cantidad de partículas del hongo en suspensión.

* Memorias del Instituto Oswaldo Cruz - 1956
* Neldson Marcolin - Pesquisa - Edición 146 abr. 2008

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