viernes, 26 de marzo de 2021

DR. KARL WOLFGANG ASCHER

Oftalmólogo checo, nació en Praga el 13 de junio de 1887. Hijo del Dr. Leopold Ascher, jefe cirujano de la Bustehrad Railway Company, y su esposa Camille Weil. 
Después de la educación preliminar en las escuelas de Praga, Ascher asistió a la Facultad de Medicina de la Universidad Karl-Ferdinand (alemana) de su ciudad natal, obteniendo su título de médico con alta distinción en 1911. 
Ya como estudiante había trabajado en el Departamento de Medicina Interna con el profesor Pribram, publicando en 1910 su primer trabajo relacionado con la detección de alantoína en orina, bajo la dirección de uno de los alumnos destacados de Hering, el profesor F. B. Hofmann. 
Luego pasó a ser sucesivamente asistente en la University Eye Clínicas en Estrasburgo, con el profesor Hertel, y en Praga, con Profesor Elschnig. 
Durante la Primera Guerra Mundial, Ascher sirvió en el Cuerpo Médico del ejército austrohúngaro, pasando el tiempo desde diciembre 1914 a junio de 1916 en Siberia en cautiverio ruso. 
Después de la guerra regresó a la clínica Elschnig, convirtiéndose en docente privado en 1922 y profesor asociado en 1937. 

En 1927 fue nombrado oftalmólogo en el Hospital de los Hermanos de la Caridad de Praga.
Los acontecimientos políticos de marzo de 1939 llevaron las actividades de Ascher en Praga a su fin. Después de pasar varios meses en Inglaterra, fue traído por el Dr. Derrick Vail a los Estados Unidos, donde llegó en Agosto de 1939, convirtiéndose en investigador asociado en oftalmología en la Universidad de Cincinnati. 
Permaneció en este cargo hasta 1947 cuando fue nombrado Instructor de Oftalmología en la Facultad de Medicina de Cincinnati, avanzando en 1949 a profesor asistente, y en 1952 a profesor asociado. 
Se retiró en 1962 como profesor asociado emérito, pero continuó su práctica privada que había llevado a cabo a lo largo de los años.
Ascher fue miembro de la Sociedad Médica del Estado de Ohio, la Asociación Médica y de la Academia de Medicina de Cincinnati y Sociedad de Oftalmología de Cincinnati. 
Era un miembro de la americana Academy of Surgeons y de la Society of Sigma Chi. 
Ascher participó activamente en las reuniones de estos grupos, presentando ponencias, exposiciones y conferencias.
Fue honrado en 1952 con la concesión de la medalla Knapp de la Sección de Oftalmología de la AMA y en 1959 fue elegido miembro de la Sociedad Americana de Oftalmología. 
Ascher fue un oftalmólogo y cirujano oftálmico de primer nivel e hizo muchas contribuciones a la oftalmología científica. Estas contribuciones cubren varios campos.
Comenzó con estudios sobre fisiología de la visión, su primer amor al que permaneció siempre apegado. 
Durante las décadas de 1920 y 1930 produjo un número notablemente grande de artículos en diversas áreas de la oftalmología clínica. 
Entre ellos destacan sus artículos sobre queratoplastia, el primero de que se publicó ya en 1919, sino también algunos estudios de laboratorio, por ejemplo sobre la química del humor acuoso. 
Ascher siempre fue a la vanguardia de los avances en oftalmología: podemos recordar su interés en el examen del ojo con lámpara de hendidura y su uso temprano de lentes de contacto de colores en el albinismo.
Fue asignado por los Departamentos de Oftalmología y Medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad de Cincinnati para trabajar con el Dr. Tom D. Spies en Birmingham, Alabama, en los aspectos de las deficiencias vitamínicas oculares. 
Estudiando los ojos de un minero de Alabama con la lámpara de hendidura, el 21 de mayo de 1941, Ascher notó un gran bucle incoloro emergiendo en el limbo, uniéndose a una vena subconjuntival en la que se creaba una corriente estratificada por un fluido incoloro que ocupaba el tercio superior de la vena. 
Esta observación, que llega a una mente bien preparada, fue interpretada por Ascher como una demostración del canal de salida final del acuoso. Formaciones similares incoloras o "vacías" parecidas a vasijas se habían antes mencionados en alguna ocasión, pero fueron ignorados o malinterpretados, en gran parte por ideas preconcebidas. 
La evaluación de Ascher de su hallazgo resolvió de una vez por todas la cuestión de si el acuoso era un líquido estancado o en circulación continua, a favor de la segunda alternativa. 
Por lo tanto Leber, Seidel y otros que habían compartido este último punto de vista fueron reivindicados triunfalmente. 
Más importante aún, este descubrimiento puso todo el asunto de la dinámica acuosa sobre una base sólida y bien se puede decir que la era moderna de la investigación del glaucoma comenzó con el descubrimiento de Ascher.
Reconociendo su importancia, Ascher dedicó los siguientes veinte años a un estudio intensivo de las venas acuosas, en parte junto con una serie de estudiantes de diversas regiones del mundo, de cuyo maestro se convirtió.
Este trabajo culminó con la monografía, en realidad su tesis para ser miembro de la American Ophthalmological Society, que apareció en 1961.
Creció y era un sensible miembro de un grupo de ciudadanos de Praga altamente civilizados y cultos de habla alemana. 
Conocía bien diez idiomas, incluido Latín y griego, y hablaba con fluidez en algunos de ellos. 
Tenía una vena poética y escribió versos en alemán desde la temprana juventud, algunos de ellos recopilados en 1963 en un volumen reducido titulado From Six Decades. 
Hasta el final mantuvo una correspondencia mundial con personas de todos los ámbitos de la vida, desde su antiguo cocinero bohemio hasta líderes en cultura y medicina. 
Murio el 17 de julio de 1971.




No hay comentarios.:

Publicar un comentario