Radiólogo danés, nacido el 24 de enero de 1885 en Copenhague; murió el 24 de ocrtubre de 1950 en Rigshospitalet, Copenhague de un cáncer de laringe.
Obtuvo su matrícula en 1902 y se graduó M. B. en 1909 con la máxima distinción.
Después de su formación médica en varias clínicas, trabajó como asistente en el departamento de Radiología del Rigshospitalet en Copenhague.
Medio año después, el destacado roentgenólogo H. J. Panner fue nombrado jefe del departamento de radiología; con él obtuvo un excelente entrenamiento.
Cuando se inauguró el nuevo hospital de Rispebjerg en 1914, Baastrup fue nombrado asistente en el Departamento de Roentgen, entonces bajo la supervisión del genial pionero J. P. Fischer, superintendente roentgenólogo de los hospitales municipales de la ciudad.
A la temprana muerte de Fischer en 1922, Baastrup lo sucedió como jefe del departamento, probablemente el más moderno de Copenhague. 
Después de recibir el título de médico jefe en 1935, Baastrup permaneció en esta posición hasta su muerte.
Como varios otros primeros roentgenólogos, llevó a cabo una práctica médica privada durante su carrera.
Baastrup fue uno de los roentgenólogos daneses que participó en la fundación de la Asociación del Norte de Radiología Médica en el Congreso que se convocó en Oslo en 1919 a tal efecto, y actuó como su secretario.
En 1927, fue nombrado secretario general de la asociación, ocupando esa función hasta 1933.
En este cargo trabajó con mayor eficacia y celo incansable.
Tuvo la oportunidad de conocer personalmente a todos sus colegas en los países del Norte, y fue muy estimado por sus modales agradables y su humor tranquilo.
Fue presidente de la primera Sociedad Radiológica Anish en 1925-26.
Como delegado de esta sociedad, asistió a la Congresos Internacionales de Radiología en París (1931), en Zúrich (1934) y en Chicago (1937).
Fue miembro de la Deutsche Kiintgengesellschaft y de la Societk de Radiologie de France.
También fue colaborador de la Radiologische Rundschau y del Acta Radiologica, siendo miembro de su hasta su muerte.
Fue miembro del Comité Editorial de la sección de Radiología del Experta Medica desde su fundación.
El Departamento de Roentgen del Hospital Bispebjerg donde Baastrup realizó su principal labor radiológica, fue siempre un tema de especial interés para él.
Originalmente planeado por J. F. Fischer en una escala bastante amplia, demostró en el transcurso de los años, ser demasiado pequeño y fue reconstruido y ampliado.
Diez años después, el desarrollo del trabajo y los métodos radiológicos exigieron una mayor ampliación. Esta vez, un nuevo edificio, que consta de de tres pisos y un sótano donde albergaba el departamento de radiología.
Baastrup lo planeó con mucha anticipación para que pudiera ampliarse en un 100 por ciento si fuera necesario. Organizó muchos detalles prácticos fundado en su larga experiencia y descrita por él en un artículo de 1950 durante su última enfermedad.
La gestión como responsable de este gran instituto, incluida la terapia, los diagnósticos radiológicos y su práctica privada, resultó una carga que le impidió obtener el título de doctor.
Publicó una gran cantidad de breves artículos, principalmente sobre el diagnóstico de cambios en el esqueleto.
Entre estos, los más significativos son su análisis exhaustivo y profundo de la llamada "atrofia ósea aguda", tema principal de la 3ª reunión de la Asociación Norte de Radiología Médica; y su trabajo sobre cambios patológicos en y entre las apófisis espinosas de las vértebras lumbares (Morbus Baastrup).
Este último trabajo parece ser típico del don del autor de analizar cambios radiológicos diminutos que a menudo se pasan por alto, combinándolos con signos clínicos.
Baastrup tenía notables dotes técnicas, manifestadas por la invención de un gran número de dispositivos a menudo sencillos, pero sin embargo prácticos.
Entre ellos se encontraba un dispositivo para evitar la omisión del filtro en terapia, introducido inmediatamente en todos los departamentos de radiología; y sus ingeniosos armarios de transluminación para películas roentgen.
Su contribución técnica más importante es el Baastrup-Johnsen Roentgen Dosimeter fundada en la idea de utilizar la capacidad de ionización de los rayos roentgen como medida de su intensidad.
Este principio fue llevado por su compañero de trabajo, el genial ingeniero A. Johnsen, lo que resultó en un aparato para medir la intensidad y la dosis, probablemente el primero de su tipo y desde un punto de vista físico representa una solución satisfactoria del problema de la dosificación.
Cuando se mostró en 1927, el aparato despertó atención viva.
Sin embargo, debido a factores económicos desastrosos y a la muerte prematura de Johnsen, nunca se fabricó al por mayor y más tarde fue reemplazado por otros sistemas.
Según Baastrup, el aparato funcionó bastante satisfactoriamente en el Departamento de Radiología de Bispebjerg donde permanece hasta el día de hoy.
Trabajos ajenos al desarrollo científico de la radiología, pero de gran importancia cultural fue la fundación del Museo de Historia Médica de la Universidad de Copenhague, institución que está asociada para siempre con el nombre de Baastrup.
Quedó fascinado en una edad temprana en el desarrollo de tubos e instrumentos roentgen y comenzó a recolectar varios tipos y artilugios pertenecientes a este campo.
Para obtener un repositorio seguro para su colección fundó, junto con amigos interesados en la historia médica, una asociación, Los Prierids de el Museo de Historia Médica.
Gracias a la energía de Baastrup, se logró obtener un antiguo edificio donde hoy se encuentra la colección histórica de roentgen. Un entorno espacioso considerado el mejor de su tipo en el mundo.
El genio versátil y el eminente interés clínico de Baastrup favorecido por ser médico de cabecera, dio a luz a varios artículos, en parte de carácter radiológico general, en parte en el campo de la medicina.
También estuvo de moda como conferenciante popular sobre temas radiológicos.
Su memorias son características e interesantes, ya que dan cuenta de la condiciones de la radiografía en Dcnmark en los primeros años.
Baastrup tenía el don de hacer amigos en todos los lugares donde iba.
Durante sus años de estudiante, fue becario de la antigua universidad Flollege Regensen, conservando desde ese momento no solo preciadas memorias, sino también el marcado carácter de un viejo estudiante con aprecio de las relaciones sociales con sus colegas.
Su humor tranquilo y amistoso y su apego a sus amigos se mantuvo sin cambios a través de la años, siendo su hogar hospitalario un agradable lugar de encuentro para radiólogos de los países del Norte.
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